Crecimiento Económico: ¿Qué se espera en 2021?
Estrategia$
Domingo, 28 de Marzo de 2021
Después de un año en el que la economía mexicana sufrió uno
de los peores reveses desde la Gran Depresión -al caer el PIB -8.2% y perder
alrededor de 2 millones de puestos de trabajo- la expectativa para 2021 es de que
habrá un rebote comprendido entre 3.5% y 4.9%, según pronostican fuentes
oficiales e instituciones financieras a la fecha. En materia de empleo hay
incertidumbre, pero podrían recuperarse entre 350 y 400 mil empleos. Es
necesario destacar el ajuste continuo de las cifras, condición que tiene como referencias
el crecimiento esperado de la economía global, la de EUA y el grado de control
sobre Covid-19.
Además de los factores anteriores, hay algunos temas en la
mente de los analistas. Por un lado, la incertidumbre derivada de diversas
políticas adoptadas por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador,
especialmente aquellas que buscan cambiar las reglas para la inversión y ponen
en entredicho el Estado de Derecho. Esto se ha traducido en un enfrentamiento
continuo entre inversionistas y la 4T, situación que se reflejó en la caída de
la inversión total -18.3% en 2020, precedida de -4.6% en 2019. Por otro, a los altibajos
en la relación bilateral con EUA, así como el escaso avance en materia de
seguridad.
Menos conocido, pero no menos importante, está el aumento
generalizado de los precios, fenómeno que empieza a generar temor de que se
inicie una etapa de estanflación. Esto,
particularmente después de darse a conocer los resultados anualizados del INPC
en la primera quincena de marzo, misma que en su componente subyacente alcanzó 4.09%
anual, cifra arriba del objetivo del Banco de México. Junto a esto, el
desempeño del índice global de
actividad económica (IGAE) que en enero registró una contracción de -4.2% en
términos anuales.
Hasta ahora,
las proyecciones puntuales en materia de precios oscilan entre 3.2% y 4.8%, ubicándose
el promedio de las instituciones financieras en 4.7%.
En este
contexto, si bien se espera que la economía nacional crezca este año, en
realidad lo hará marginalmente, pues de presentarse la mejor expectativa ello apenas
permitirá alcanzar el nivel que se tenía en 2016.
En el caso de
Baja California, si bien no se tienen aún datos sobre el comportamiento del
PIBE en 2020, estimaciones propias indican que fue de alrededor de 5.5%, un resultado
extraordinariamente bueno si se toma en consideración que, a raíz de la pandemia,
el pronóstico apuntaba a tener un año igual o más desfavorable que el de 2009, cuando
la Gran Crisis significó un desplome de -10.9%.
El buen
desempeño económico en el Estado permitió que, entre las tres entidades con
resultado positivo en materia de empleo en el país, el nuestro fuera el que más
generó con un total de 27,952 plazas. Su vocación industrial le permitió aportar
dicha cantidad, pues el sector generó 29,023 altas.
A reserva de tener
más datos sobre el comportamiento de las distintas actividades económicas
estatales, la expansión se explica por un mejor desempeño en el sector
agrícola, principalmente en productos para el mercado de exportación.
Asimismo, en las actividades secundarias donde destacaron la producción del
equipo de transporte; la fabricación para exportación del equipo de
computación, comunicación y medición, aparatos eléctricos y equipo de
generación de energía eléctrica; en las ventas de electricidad doméstica y la
generación pública de electricidad; también en la construcción en edificación
no residencial. El sector terciario tuvo menor dinamismo, influyendo en ello
los comportamientos en los transportes, los servicios de alojamiento temporal y
de preparación de alimentos y bebidas; los servicios de esparcimiento,
culturales y deportivos, y otros servicios recreativos; finalmente, el comercio
también se redujo, según reportes de Inegi.
Para este año, no esperamos una repetición de los resultados
de 2020. Aunque positivo, la expansión será menor para siituarse entre 3.8% y
4.5%, Las razones de este comportamiento se explican en parte, por el resultado
de 2020 que, al ser mayor a lo esperado, deja menor margen para repuntar. Y es
que no hay que olvidar que en 2019 el PIBE creció únicamente 1.8%.
Se pronostica que la economía de EUA crecerá este año entre
5% y 6.5% gracias a los estímulos económicos que ha puesto en marcha el
gobierno del Presidente Joe Biden. Y es indudable que esto “jalará” en sentido
positivo a la economía de BC. No obstante, hay que ser cautos dadas las
condiciones de incertidumbre que plantean los procesos electorales próximos. Sus resultados serán clave para la recuperación
de la confianza de los inversionistas, tanto nacionales como extranjeros. Si Morena
prevalece, implicará abrir camino para que realicen cambios constitucionales que
no sólo afecten a sectores específicos, sino que puedan dar lugar a conflictos
con nuestros principales socios comerciales.
Para muchos, las cancelaciones de las inversiones del NAIM y
la cervecera Constellation Brands, la suspensión de las rondas petroleras y la
disputa con los contratistas de los gasoductos aunado a la persistencia de
fortalecer a Pemex y CFE aun cuando se viole la Ley, no es cosa menor, como
también no lo es el cobro bajo presión que ha hecho el Ejecutivo estatal de BC
en materia de uso de agua. Todo ello, ya afectó los niveles de inversión fija
bruta en el país y sin ésta, no puede haber desarrollo económico.
El consenso para 2021 es de una recuperación económica más
rápida de lo que se previa hace un año. No obstante, hay que estar pendientes
de los retos que significa una tercera ola de contagios por Covid-19, así como los
vaivenes políticos que se avizoran.