Los relevos en Banxico
La Voz de la Frontera
Lunes, 28 de Enero de 2019
Hace unos días, la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) quedó integrada nuevamente con cinco elementos al rendir protesta como subgobernadores Jonathan Heath Constable y Gerardo Esquivel Hernández, en una sesión extraordinaria de la Comisión Permanente en la Cámara de Diputados.
Heath sustituye a Manuel Ramos Francia, quien concluyó su periodo a fines de diciembre pasado. Estará en el cargo de aquí hasta el 31 de diciembre de 2026. Por su parte, Esquivel reemplaza a Roberto del Cueto Legaspi, quien renunció por motivos de salud. Su comisión durará hasta diciembre de 2022.
Los nombramientos generaron diversas opiniones debido a los antecedentes profesionales y laborales de ambos economistas. Heath va más con las corrientes de pensamiento neoliberal al tener un doctorado por la Universidad de Pennsylvania y contar con una larga trayectoria de trabajo en el sector privado, en la que destaca como consultor del Grupo Financiero Serfin y HSBC. Por su parte, Esquivel es egresado de la UNAM con un Doctorado por la Universidad de Harvard. Se le reconoce su compromiso hacia el combate a la pobreza y la erradicación de la desigualdad a través de políticas públicas al respecto. Ha sido colaborador de AMLO desde que éste fue jefe de gobierno de la Ciudad de México, así como asesor externo durante la última campaña presidencial. Por esta relación, algunos dudan que pueda ejercer su función con independencia.
La verdad ambos tienen frente a sí un gran reto. El clima de incertidumbre político y económico que trajo consigo el cambio de régimen, aunado a las amenazas que se presenta la economía global, auguran un crecimiento limitado con mucha volatilidad. A pesar de que la inflación tuvo una desaceleración significativa en la primera quincena de este año, hay dudas de que Banxico logre el objetivo de 3%, más/menos un punto porcentual. En el mejor de los casos, algunos pronostican alcance el límite máximo, es decir, 4%.
Desde hace tiempo he insistido que la meta del Banco Central no está en línea con su mandamiento prioritario de procurar la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda nacional. Para ello es indispensable que el aumento de los precios en nuestro país no esté muy alejado de lo que ocurre en EU, nuestro principal socio comercial. La inflación de nuestro vecino en 2015 fue de 0.1%, en 2016 de 1.3%, en 2017 de 2.1% y en 2018 2.2%. Bajo la premisa anterior, lo lógico sería que Banxico ajustara su meta objetivo a 3%, más/menos medio punto porcentual.
La primera Junta de Gobierno para decidir lo concerniente a la tasa de interés que regirá en los próximos meses, se llevará a cabo el 7 de febrero próximo. En principio no veo modificación a la tasa vigente. Esto en virtud del anuncio de la Fed en diciembre de que sólo prevén dos ajustes a la tasa de interés en 2019. Asimismo, a la posibilidad de que la desaceleración de la inflación registrada en la primera quincena de enero se mantenga en la medición mensual.
En este contexto, lo más importante de dicha reunión serán los posicionamientos que asuman Heath y Esquivel, pues serán clave para entender el rumbo de la política monetaria para los próximos años. Espero que sea una de mayor compromiso para contener la inflación, especialmente en comparación a la aplicada durante la administración de EPN.
Lunes, 28 de Enero de 2019
Hace unos días, la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) quedó integrada nuevamente con cinco elementos al rendir protesta como subgobernadores Jonathan Heath Constable y Gerardo Esquivel Hernández, en una sesión extraordinaria de la Comisión Permanente en la Cámara de Diputados.
Heath sustituye a Manuel Ramos Francia, quien concluyó su periodo a fines de diciembre pasado. Estará en el cargo de aquí hasta el 31 de diciembre de 2026. Por su parte, Esquivel reemplaza a Roberto del Cueto Legaspi, quien renunció por motivos de salud. Su comisión durará hasta diciembre de 2022.
Los nombramientos generaron diversas opiniones debido a los antecedentes profesionales y laborales de ambos economistas. Heath va más con las corrientes de pensamiento neoliberal al tener un doctorado por la Universidad de Pennsylvania y contar con una larga trayectoria de trabajo en el sector privado, en la que destaca como consultor del Grupo Financiero Serfin y HSBC. Por su parte, Esquivel es egresado de la UNAM con un Doctorado por la Universidad de Harvard. Se le reconoce su compromiso hacia el combate a la pobreza y la erradicación de la desigualdad a través de políticas públicas al respecto. Ha sido colaborador de AMLO desde que éste fue jefe de gobierno de la Ciudad de México, así como asesor externo durante la última campaña presidencial. Por esta relación, algunos dudan que pueda ejercer su función con independencia.
La verdad ambos tienen frente a sí un gran reto. El clima de incertidumbre político y económico que trajo consigo el cambio de régimen, aunado a las amenazas que se presenta la economía global, auguran un crecimiento limitado con mucha volatilidad. A pesar de que la inflación tuvo una desaceleración significativa en la primera quincena de este año, hay dudas de que Banxico logre el objetivo de 3%, más/menos un punto porcentual. En el mejor de los casos, algunos pronostican alcance el límite máximo, es decir, 4%.
Desde hace tiempo he insistido que la meta del Banco Central no está en línea con su mandamiento prioritario de procurar la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda nacional. Para ello es indispensable que el aumento de los precios en nuestro país no esté muy alejado de lo que ocurre en EU, nuestro principal socio comercial. La inflación de nuestro vecino en 2015 fue de 0.1%, en 2016 de 1.3%, en 2017 de 2.1% y en 2018 2.2%. Bajo la premisa anterior, lo lógico sería que Banxico ajustara su meta objetivo a 3%, más/menos medio punto porcentual.
La primera Junta de Gobierno para decidir lo concerniente a la tasa de interés que regirá en los próximos meses, se llevará a cabo el 7 de febrero próximo. En principio no veo modificación a la tasa vigente. Esto en virtud del anuncio de la Fed en diciembre de que sólo prevén dos ajustes a la tasa de interés en 2019. Asimismo, a la posibilidad de que la desaceleración de la inflación registrada en la primera quincena de enero se mantenga en la medición mensual.
En este contexto, lo más importante de dicha reunión serán los posicionamientos que asuman Heath y Esquivel, pues serán clave para entender el rumbo de la política monetaria para los próximos años. Espero que sea una de mayor compromiso para contener la inflación, especialmente en comparación a la aplicada durante la administración de EPN.